Estimulación creativa
Para dejar atrás la mala costumbre ocultista
En todos estos años de pregrado he notado un común denominador en el razonamiento universitario; nos encanta guardarnos los consejos útiles, convocatorias a concursos y espacios que nos pueden ayudar a crecer.
Quiero creer que esta forma de pensar, algo triste y mezquina, es algo natural del ser humano; ocultar las oportunidades para que nuestro, por ahora compañero de aula, pero más adelante, un tenaz competidor no ocupe un espacio que nosotros podríamos alcanzar.
Si algo he aprendido de estos adorables compañeros (que ya describí líneas arriba con mucho cariño) es que no vale la pena comerse la información si es que en verdad queremos como profesionales transformar el mundo ¿no? quizás en nuestro egoísmo opacamos a alguien que por timidez no se atreve a exponerse.
Por eso, con la intención de que todos crezcamos y nos desarrollemos, quiero comentarles de algo que a muchos de mis compañeros multidisciplinarios les puede llamar la atención; los estímulos económicos para la actividad cultural que ofrece el Ministerio de Cultura.
Si crees que el estado no apoya como debería a la difusión de la cultura como herramienta de transformación social, dejame decirte que no te equivocas del todo, pero hay una excepción, desde hace algunos años el estado promueve y financia obras dentro del campo del cine, las artes escénicas y fomento del libro; brindando oportunidades a escritores, dramaturgos de mesa de noche y otros profesionales y experimentados a materializar sus ideas.
¿Tienes un guion o storyline empolvandose? ¡sácalo! repiensa el concepto, corrigelo y presentalo. Eso sí, ten en cuenta lo siguiente para que no te pases toda la madrugada en el sistema del Ministerio de Cultura.
-Lee y lee y vuelve a leer los documentos de cada concurso al que te piensas presentar.
-Considera y respeta los plazos de presentación.
-Inscribete con tiempo al DAFO (Y si no tienes RUC, corre a la SUNAT).
-Si eres nuevo, busca una productora o empresa para que presente tu proyecto, debe ser de confianza porque a su nombre se desembolsará el dinero del estímulo.
-Ten paciencia y buen humor para aguantar los meses de espera por los resultados.
Recuerda, no hay peor intento que el que no se hace, postula, compite y gana experiencia. Sigamos con esta buena costumbre de compartir la información, hagamos que más se atrevan a postular y demostrar su talento, tenemos tiempo.
¡Éxitos en los concursos!